El Coro Inicial del Magisterio, dirigido por Liliana Sánchez, vivió una experiencia inolvidable durante su campamento, una propuesta pensada para continuar el trabajo vocal y musical que desarrollan a lo largo del año, pero también para fortalecer los lazos entre las estudiantes.
Fueron dos días intensos de juegos, ensayos, canciones y momentos compartidos, en un clima de compañerismo y alegría. Cada actividad estuvo pensada no solo para seguir creciendo musicalmente, sino también para afianzar el grupo y disfrutar juntas de una experiencia distinta, fuera del aula.
Como broche de oro, el cierre del campamento tuvo un momento muy especial: las familias que se acercaron a buscar a las chicas fueron recibidas con un emotivo concierto sorpresa. Para muchas fue la primera vez que veían a sus hijas cantar en un escenario, lo que convirtió la despedida en un instante cargado de emoción, orgullo y ternura.