En la Escuela del Magisterio se realizó el taller "Competencias emocionales, sociales y para la vida y el bienestar en el aula" a cargo del capacitador, docente, licenciado y Magister José Martín. La charla de capacitación, fue dirigida a profesores, preceptores y personal administrativo de nuestra institución.
Respecto de la fundamentación de la capacitación es importante señalar que las emociones juegan un papel fundamental en los procesos de adaptación ante los cambios –deseados o imprevistos–. También en el desempeño diario de nuestras actividades, en los procesos de aprendizaje, interacciones interpersonales y por supuesto en nuestro bienestar y salud.
En función de lo señalado, la situación de confinamiento y crisis sanitaria ha supuesto un desafío para la mayoría de las personas respecto a la gestión de sus emociones. "Hemos puesto en marcha estrategias de toda índole, físicas y psicológicas, para propiciar una mejor adaptación y afrontar la incertidumbre, la reducción de fuentes de gratificación habituales interpersonales, para propiciar emociones agradables, a pesar de las dificultades, e idear maneras de reducir o manejar el estrés", fundamentaron.
Por esto, el concepto de competencia está en revisión debido a su complejidad. Hay diversas categorías de competencias: técnicas, profesionales, participativas, personales, básicas, clave, genéricas, transferibles, emocionales, socio-emocionales, etc. En este encuentro se tomaron en consideración las competencias emocionales, entendidas como un subconjunto de las competencias personales.
¿Por qué es importante el desarrollo de competencias emocionales?
Durante la capacitación se explicó que esta habilidad es esencial para construir relaciones con otras personas. También es clave para comprendernos a nosotros mismos y a nuestras necesidades. Por otro lado, pueden ayudar a manejar los momentos difíciles de la vida.
Además, al desarrollar una mejor comprensión y conexión con nuestros sentimientos y nuestras necesidades, explicaron, podremos desarrollar una vida más equilibrada y una buena salud mental. "Aunque sea difícil detener nuestra "charla interior", a través de las diversas competencias emocionales podemos desarrollar una charla interior más compasiva también con nosotros mismos", indicaron desde la capacitación.